Hojas Amarillas: Las 5 Causas Comunes y Sus Soluciones Definitivas en Plantas de México
Diana Loza
- 27 de octubre de 2025

¿Por qué mis Hojas Están Amarillas? Una Alerta en tu Jardín Mexicano
El amarillamiento de las hojas, conocido técnicamente como clorosis, es una de las señales de auxilio más comunes que nos envían nuestras plantas. Desde una humilde maceta en un balcón en la Condesa hasta un huerto en Morelos, este cambio de color es una clara indicación de que algo en su entorno o nutrición no está funcionando. En el diverso clima de México, donde los extremos de sequía e inundaciones pueden ocurrir, el diagnóstico correcto es crucial. En lugar de entrar en pánico, te enseñaremos a "leer" a tu planta. Aquí te presentamos las 5 causas principales de las hojas amarillas y cómo solucionarlas para devolverle el verde y la vitalidad a tu jardín.
1. El Error Más Común: Riego Inadecuado
El problema número uno, y la causa más frecuente de hojas amarillas, es un fallo en el riego. Lo peor es que tanto el exceso como la falta de agua pueden manifestarse de forma similar.
- Exceso de Riego (Asfixia Radicular): Si las hojas se ponen uniformemente amarillas y se sienten blandas o mustias, y la tierra está permanentemente húmeda, tus raíces se están asfixiando por falta de oxígeno.
- Solución: Suspende el riego. Asegúrate de que la maceta tiene drenaje y que el agua no se acumula en el plato inferior. Si la tierra está muy apelmazada, remuévela suavemente para airear las raíces.
- Falta de Riego (Deshidratación): Si las hojas se ven amarillas, secas y crujientes, y el sustrato está duro y seco, necesita agua urgente.
- Solución: Dale un riego profundo. Para macetas muy secas, sumergir la maceta en un balde de agua por 15 minutos puede ser una "terapia de choque" efectiva.
2. Deficiencias Nutricionales: El Hambre Oculta
La clorosis es a menudo el resultado de la falta de ciertos nutrientes esenciales, especialmente si tus plantas han estado mucho tiempo en la misma tierra o maceta.
- Deficiencia de Nitrógeno (N): El nitrógeno es clave para el color verde (clorofila). La deficiencia se nota primero en las hojas viejas (las de abajo), que se vuelven amarillas por completo.
- Solución: Aplica un fertilizante rico en nitrógeno o añade abonos orgánicos como humus de lombriz o compost.
- Deficiencia de Hierro (Fe): Conocida como clorosis férrica. Se manifiesta en las hojas nuevas (las de arriba), donde el tejido se vuelve amarillo, pero las venas permanecen verdes.
- Solución: Aplica quelatos de hierro al suelo o un acidificante, ya que en muchos suelos alcalinos de México, el hierro está presente pero inaccesible para la planta.
3. Mala Iluminación: No Hay Luz, No Hay Clorofila
La clorofila (el pigmento verde) solo se produce con luz. Si tu planta no recibe la cantidad adecuada, el proceso se interrumpe.
- Falta de Luz: Las hojas nuevas salen pálidas o amarillas, y la planta se estira buscando la fuente de luz. Esto es común en interiores en grandes ciudades donde las ventanas son la única fuente.
- Solución: Mueve la planta a un lugar con más luz solar indirecta. Gírala periódicamente.
- Exceso de Luz/Quemaduras: Si tu planta de sombra recibe sol directo en las horas más intensas (especialmente el mediodía en verano), pueden aparecer manchas amarillas o blancas, como si estuvieran "blanqueadas".
- Solución: Proporciona sombra parcial o reubícala.
4. Temperaturas Extremas y Corrientes de Aire
Las plantas, especialmente las tropicales que tanto se usan en jardines de México, son sensibles a los cambios bruscos de temperatura.
- Frío o Corrientes de Aire: Las hojas pueden volverse amarillas de repente y caerse como mecanismo de defensa. Esto es común en inviernos frescos o cerca de puertas o aires acondicionados.
- Solución: Protege tus plantas de las heladas y de las corrientes frías. En invierno, resguarda las macetas sensibles.
5. pH del Suelo Inadecuado
El pH del suelo es fundamental para la absorción de nutrientes. En gran parte del Valle de México, por ejemplo, los suelos tienden a ser alcalinos (pH alto).
- Suelo Alcalino (pH alto): Bloquea la absorción de micronutrientes como el hierro, lo que deriva en clorosis férrica (hojas nuevas amarillas con venas verdes).
- Solución: Corrige el pH con turba, vinagre diluido en agua de riego, o añadiendo azufre al suelo para hacerlo más ácido y facilitar la absorción.
La Solución a las Hojas Amarillas Está en la Observación
El diagnóstico de las hojas amarillas siempre comienza con una inspección minuciosa: ¿son hojas nuevas o viejas? ¿está la tierra húmeda o seca? ¿hay venas verdes? La clave para que tu jardín en México se mantenga saludable y vibrante es la observación constante y la acción preventiva. Al entender la razón detrás de la clorosis, tienes el poder de corregir el problema y asegurar que tus plantas recuperen su color y sigan embelleciendo tu entorno.

